martes, 5 de marzo de 2013
Reseña de libro científico
Resumen del libro " Epilepsia"
La enfermedad sagrada del cerebro
El fondo de cultura económica, llevó a partir de su nacimiento en 1986, un ritmo siempre ascendente que superó las aspiraciones de las personas e instituciones que la hicieron posible: nunca faltó material, y los científicos mexicanos desarrollaron una notable labor en un campo nuevo par ellos: escribir de modo que los temas más complejos e inaccesibles pudieran ser entendidos por los jóvenes y los lectores sin información científica.
El objetivo es que los jóvenes se interesen por la ciencia y continúen con las investigaciones que serán de gran ayuda para las generaciones futuras.
Ésta obra fue escrita por Simón Brailowsky quien da a entender la importancia del conocimiento de ésta enfermedad que se hace presente en la vida diaria, de forma que es importante conocer de ella: sus causas, sus efectos, sus síntomas, clasificación y en que consiste tal enfermedad.
Un de las enfermedades neurológicas más frecuentes es la epilepsia, al menos el 5 % de la población mundial ha experimentado una crisis, por lo general son adolescentes niños y viejos. Entonces digamos que la epilepsia no es un estado de locura, retraso mental, no es contagiosa, no es mortal y no se asocia a una maldición, en la mayoría de los casos puede ser controlada. La epilepsia puede ser vista con temor por aquellas personas que no conocen sobre ella, al epiléptico por que no conoce la reacción que tenga y la familia porque lo ven como un estigma social. Tal vez una de las causas por las cuales la epilepsia sea un temor porque una vez se llamó "el mal sagrado" desde su interpretación milenaria, ya que se decía que el epiléptico era capaz de comunicarse con los dioses y ser visitado por ellos. El hombre tardó mucho tiempo para saber que ésta alteración se originaba en el cerebro, en sí, la epilepsia no se relaciona con algo sagrado ni diabólico.
Tal como el médico como las personas nos preocupamos por el bien para nuestros semejantes, comprender la epilepsia es comprenderse así mismo y comprender a los demás.
La epilepsia viene del griego, y quiere decir "ser tomado" o sorprendido. La epilepsia no es una enfermedad sobrenatural ni divina, es la activación repentina, excesiva y usualmente breve, de neuronas cerebrales.
Hay diversas causas para éste tipo de alteración: hemorragias, alteraciones del tipo cerebral, entre otras.
En la mayoría de los casos se pueden controlar con fármacos y cuando estos no funcionan es recomendable la cirugía.
Sólo algunos tipos de epilepsia es hereditaria, en el caso de que ambos padres sean epilépticos hay un 6% de probabilidad de que ésta se desarrolle en los hijos. Es más probable que los hijos desarrollen la enfermedad cuando la madre es epiléptica que cuando el padre presente la enfermedad.
La epilepsia puede curarse de acuerdo al tipo de enfermedad que se presente.
Hay dos grandes tipos de epilepsias: las crisis generalizadas y las crisis parciales. Las crisis generalizadas puedes presentarse con convulsiones, movimientos corporales bruscos de ambas mitades del cuerpo (el hemisferio cerebral derecho controla la parte izquierda del cuerpo y viceversa), o sin movimientos pero con alteraciones de la conciencia. Las crisis parciales se presentan con síntomas motores, sensoriales o emocionales que se generan en una parte del cerebro.
Las crisis pueden presentarse de diferente forma de acuerdo a la edad del paciente.
Hay factores que pueden facilitar la aparición de las crisis: la luz intermitente, el alcohol, niveles bajos de azúcar o calcio en la sangre, falta de oxígeno, la fiebre alta y, lo más frecuente, que el paciente no siga las instrucciones de su médico y no se tome su medicina.
La epilepsia se diagnostica con la historia clínica, la exploración física, el examen neurológico o las pruebas de laboratorio, en la cual se encuentra el electroencefalograma (el registro de la actividad eléctrica cerebral), la radiografía computarizada, la resonancia magnética nuclear, exámenes de sangre o líquido cerebro-espinal.
A través de las épocas, la epilepsia ha gozado de una gran reputación, en varias culturas se encontraba una visión equivocada de tal enfermedad, se le conocía al epiléptico como un lunático, en Mesopotamia se le relacionaba con "la mano del pecado".
El texto antiguo más conocido sobre la epilepsia es el de Hipócrates sobre la enfermedad sagrada, escrito hacia el año 400 a.C. En ésta obra se hacía hincapié el origen físico de la enfermedad, independientemente de la cultura, las enfermedades nerviosas y mentales son las que más frecuentemente se han generado interpretaciones mágico-religiosas.
Antiguos escritos médicos señalaban al corazón, y no al cerebro como el centro de las facultades intelectuales. También en América prehispánica se tenía ésta concepción: el corazón era el centro de la conciencia, que los desmayos eran amortecimiento del corazón. La epilepsia era conocida como un amortecimiento grave, causado por opresión de éste órgano.
Una de las interpretaciones que sigue manifestando influencia hasta en nuestros días fue aquella que se originó a principios de la Era Cristiana. Fue el periodo de los éxtasis y los trances proféticos, considerados como formas de posesión. El paciente (la víctima), es presa del poder de algún ente sobrenatural, o es invadido por alguna fuerza fantasmagórica o divina, a la cual debe obedecer. La manifestación iba desde la convulsión generalizada con pérdida de la conciencia (lo único que puede hacerse es proteger al paciente de que se lastime), hasta un estado de inspiración extrema en el que el profeta recibía el mensaje divino.
La relación entre la brujería y la epilepsia contaba desde aquella época (hacia 1580) con un texto: el Malleus malificarum, libro clásico de casería de brujas que se informaba de caso de epilepsia infligida por medio de huevos que habían enterrado junto a los cuerpos de bruja. El libro demostraba una gran dificultad en distinguir la epilepsia de la brujería.
Escritos de la antigüedad afirman que hubo personajes importantes en la historia que padecían de epilepsia, según la creencia de la antigüedad se les consideraba a los epilépticos personas de gran inteligencia. En esas épocas según la lista de Taxil que da a conocer a aquellas persona que fueron víctimas de epilepsia. Cabe municionar a Hércules, Sócrates, Mahoma, Escoto y Calimaco la sufrían, pero, también podemos
mencionar a Lord Byron, a Flaubert e incluso a Van Gogh, quien -de acuerdo al gran epileptólogo francés Henrri Gastaut- también padecía de epilepsia focal y se había amputado una oreja en una de sus crisis.
En la epilepsia participan todas las células que componen el sistema nervioso: las neuronas, la glía, las células endoteliales y las que forman las paredes de los vertículos cerebrales, las cavidades por las cuales circula el líquido cefalorraquídeo. La epilepsia es una manifestación clínica que es provocada por descargas excesivas y simultanea de neuronas cerebrales.
El diagnóstico de la epilepsia se lleva acabo de acuerdo a la historia clínica, un interrogatorio al paciente y a los familiares. En éste tipo de casos es importante tomar en cuenta aquella información de sus personas más cercanas, una información detallada de cuáles son las características de las crisis, tomar el tiempo de cuánto dura la crisis, si hay la posibilidad de grabarlo en video, ya que ésta información será de gran ayuda para el médico y para poder proceder con el tratamiento indicado para la enfermedad.
Si se busca tener más información sobre el tipo de enfermedad es necesario hacer los exámenes de laboratorio para saber mejor la causa y dar el tratamiento indicado, entre algunos estudios de laboratorio se encuentran: topografía axilar computarizada (TAC), que es la utilización de ratos x, mide las densidades del tejido cerebral, el líquido cefalorraquídeo y posibles anomalías. La resonancia magnética nuclear (RMN), es otra técnica para obtener "fotografías" del interior del cuerpo.
Existen dos tipos de clasificación de el campo de la epilepsia: la de las crisis epilépticas Existen y los síndromes epilépticos. Las crisis se producen repentina e involuntariamente, de duración limitada que se produce por cambios motores, autonómicos o de conciencia que se producen por la actividad cerebral anormalmente exagerada. Pueden ser de inicio temprano (antes de la adolescencia) o tardío. Las crisis pueden clasificarse de acuerdo a su presentación clínica y sus características electroencefalográficas. Las crisis no siempre son epilépticos. Se pueden presentar por intoxicación medicamentosa, fiebre alta, traumatismos, tumores infecciones, embolias o hemorragias, etc.
Una crisis se define como la aparición brisca de un estado de actividad cerebral excesivo, con la hiperactividad de un grupo de neuronas cerebrales. Una crisis se origina en el lóbulo temporal puede presentarse como un cambio en la conducta, sin pérdida de la conciencia, donde el sujeto no parece ser el mismo.
Las crisis pueden clasificarse en dos grupos: crisis generalizadas y crisis parciales o focales:
1) Crisis generalizadas (convulsivas o no compulsivas)
a) Crisis de ausencias (petit mal)
b) Crisis mioclónicas
c) Crisis tónicas
d) Crisis atónicas
e) Crisis clónicas
f) Crisis tónico-clónicas (gran mal)
2) Crisis parciales (focales, locales)
a) Crisis parciales simples (sin alteración del estado de conciencia)
b) Crisis parciales complejas (del lóbulo temporal o psicomotoras; con alteraciones del estado de conciencia)
c) Crisis parciales con generalización secundaria (tónico-clónicas, tónico o clónicas)
La epilepsia en los niños es un problema particular. Para los padres, puede representar una catástrofe, sobre todo cuando éstos no saben que esperar; para el niño, la catástrofe es la reacción de su entorno. La mayoría de los casos son controlables y el niño puede llevar una vida normal.
La epilepsia es más frecuente en los niños que en los adultos, y en particular en los primeros años de vida. Hay algunas de las causas por las cuales los niños desarrollen epilepsia: traumatismo durante el parto, hemorragias, hipoxia o isquemia, infecciones congénitas o postnatales, malformaciones congénitas, alteraciones metabólicas ( por niveles de azúcar o de calcio bajos en la sangre), o por drogas que la madre haya estado consumiendo. El diagnóstico se lleva a cabo en el examen cuidadoso, información de los padres, del embarazo y las pruebas de laboratorio.
Si, como hemos dicho la epilepsia puede considerarse un trauma, para un joven por estar pasando por la adolescencia. La inseguridad, los cambios hormonales, la percepción de si mismo, la inquietud sexual, lo frágil que son las emociones en ese estado transicional. El joven se encuentra expuesto a varias cosas que pueden agravar el padecimiento, en particular el alcohol. La pubertad se manifiesta en cambios físicos y mentales muy importantes. El aumento en los niveles de hormonas sexuales ( los estrógenos y progesterona en la mujer y testosterona en el hombre), afecta no sólo a los órganos sexuales sino también al cerebro.
Algunas de las manifestaciones que pueden confundirse con crisis epilépticas son los síncopes. El síncope el que conocemos como desmayo. En el caso de los niños puede considerarse síncope pálido infantil. Puede ocurrir en casos de "berrinche" o llanto intenso, el niño se pone pálido por cualquier causa anterior. Algunos niños contienen la respiración y pierden el sentido acompañado de movimientos anormales, o exageración del tono muscular, sacudidas producto de la falta de oxígeno al cerebro.
Algunas de las manifestaciones que pueden confundirse con crisis epilépticas son los síncopes. El síncope el que conocemos como desmayo. En el caso de los niños puede considerarse síncope pálido infantil. Puede ocurrir en casos de "berrinche" o llanto intenso, el niño se pone pálido por cualquier causa anterior. Algunos niños contienen la respiración y pierden el sentido acompañado de movimientos anormales, o exageración del tono muscular, sacudidas producto de la falta de oxígeno al cerebro.
Para finalizar, la epilepsia es una enfermedad causada por las neuronas que se debe de detectar a tiempo para que pueda ser controlada, aunque hay casos en que los fármacos ya no sirven para la enfermedad se tendría que recurrir a las cirugía. Es muy importante conocer ésta enfermedad ya que conocerla bien equivale a un bien tratamiento por parte del médico. Como lo menciona el libro la epilepsia le puede dar a cualquier persona, y es importante seguir de cerca la enfermedad y la instrucciones del médico, la epilepsia se puede controlar con fármacos.
Esto sería todo sobre lo que comprendí del libro de epilepsia que me pareció un libro muy interesante, una investigación de calidad, un buen trabajo del autor utilizando un lenguaje no muy formal para el entendimiento por parte de los jóvenes.
Espero y con ésta pequeña información nos demos cuenta que la epilepsia es una enfermedad y que no se asocia con nada que tenga que ver con religión o una interpretación diabólica de ésta enfermedad, "la enfermedad sagrada del cerebro".
Por: Christopher Guerrero Morales
2LC2
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario